Hasta el no-lector más recalcitrante caerá rendido ante estos 30 libros

FI Libros para quien no le gusta leer

Hay niños a los que no les gusta leer. Yo soy de la opinión de que se trata de una postura legítima, que nos va a gustar lo mismo a todos. Niños que crecen leyendo lo menos posible y que de adultos tienen otros hobbies. Mi marido fue un niño así.

Hay miles de tipos de libros distintos y que no le guste leer no implica que aborrezca todos los libros que existen. Y quién sabe, quizá amar un libro le lleve a amar dos, tres, diez libros más. Diez mundos nuevos a su alcance.

Ciertos libros tienen más probabilidades de apelar a las sensibilidades de los más adversos a la lectura. Libros espectaculares, libros que descubran mundos nuevos, libros silentes, libros con los que reír, libros con los que experimentar o ensuciar la casa, libros con formatos rompedores o con ilustraciones alucinantes. Y para todo lo demás, Harry Potter.

Pin Cuentos para ninos que no leen 1

Libros sin palabras: para no-lectores de todas las edades

Ante un niño al que no le gusta leer probaría en primer lugar con un buen libro silente. La serie Imagina de Aaron Becker, por ejemplo, narra una maravillosa aventura en la que los dos protagonistas viajan entre nuestro mundo y una realidad paralela gracias a sus pinturas mágicas. Visitan tierras increíbles, salvan al reino de la luz y vencen a los malos. Una historia con la intensidad y la emoción de La historia interminable de Michael Ende pero sin letras, para aquellos a quien se le resistan.

Muchos más libros silentes

Libros de su experiencia inmediata: cada momento de la vida tiene un libro perfecto

A veces los críos tienen preguntas. A veces no sabemos responderlas. A veces, ellos mismos no saben formularlas. Afortunadamente hay autores que, a saber cómo, recuerdan algunas de estas preguntas y escriben libros para darles respuesta.

Yuval Zommer es uno de esos autores. Los libros que han aparecido en español son espectaculares obras de referencia sobre biología (flores, insectos, bestias y animales marinos respectivamente) con unas ilustraciones llenas de vida y datos concisos a la vez que apasionantes. Si las obras de referencia fueran comida, estos libros serían los frutos secos: deliciosos, nutritivos e imposibles de dejar.

Más libros de divulgación en formato ilustrado

Otras veces, como nosotros, los peques quieren revivir una experiencia que disfrutaron hace poco. ¡Que no le guste leer no quiere decir que no le guste la nieve o la playa!

Y no podemos olvidarnos de los clásicos libros para acompañar las transiciones: el nacimiento de un hermanito, el primer día de escuela, la muerte, la adolescencia. A veces un buen libro es el mejor acompañamiento, incluso para los que nos les gusta leer.

No le gusta leer, ¿pero le gusta reír? Prueba estos libros de humor

El objetivo está claro: que el Peque se ría tanto que se le olvide que está leyendo un cuento. Por ejemplo, los libros escatológicos. A todos los críos les gusta un buen libro de pedos, cacas o pañales. Como por ejemplo El Topo que quería saber quién se había hecho en su cabeza.

Puntos extra para los libros que hagan reír al adulto también. Reírse está bien, pero reírse en compañía está mucho mejor.

Libros con ilustraciones alucinantes

Los libros entran por los ojos, sobre todo si son álbumes ilustrados. Y a menudo, hasta el niño no le gusta leer se puede quedar embobado con ilustraciones mágicas, hiperrealistas, coloridas o inspiradoras.

Como es cuestión de gustos, voy a proponer unos cuantos aquí, pero lo más importante es preguntarse qué nos gusta en casa. ¿Qué libros han tenido más éxito? ¿Qué películas de animación gustan? Puede haber pistas en cualquier sitio.

Libros de experimentos y actividades de tiempo libre: cuando el mundo es demasiado interesante para sentarse a leer

No dejes que la estimulación lectora se interponga entre el Peque y el mundo: deja que sea un trampolín para descubrir las leyes de la física, la naturaleza, todo lo que le rodea y le apasiona. Quizá estos libros no sean de los que le tengan sentando hasta que se los lean de cabo a rabo, pero es que algunos libros se leen a sorbitos, yendo del libro a la realidad y vuelta a cada rato.

Libros con formatos originales

Los formatos sorprendentes pueden ser una gran puerta de entrada al mundo escrito: para un no-lector, puede ser el poquito de azúcar que haga que la píldora sepa mejor. Y antes de que te des cuenta, ¡se ha leído el libro entero!

Ya tengo un post entero sobre libros interactivos pero aquí va un aperitivo:

Para (pre)adolescentes con ansias de vivir y sin ganas de leer: Harry Potter, Tolkien


Digo Harry Potter y Tolkien como podría decir Los futbolísimos o Los Quebrantasueños. Muchos niños solo leen un libro, una y otra vez. ¡Deja que lo disfrute! Si acaso, búscale más libros de la serie o del autor.

Audiolibros


¿Has probado audiolibros? Nosotros los usamos mucho en casa con cuentos en alemán y le veo mucho potencial. Sobre todo los ponemos en el coche o cuando la peque está en su cuarto jugando tranquilamente. Son una manera estupenda de que la Peque escuche alemán correcto en casa, aunque carezca del aspecto interactivo que proporciona una conversación en vivo.

Pero también escuchamos muchos audiocuentos en español. Nuestros favoritos en español a día de hoy son:

Bellaterra Música Ed. - Los audiocuentos
Cuentos con diálogo - Cuentos completos de Beatrix Potter
Vanesa Pérez-Sauquillo - Cuentos con beso para las buenas noches

Libros comprensivos con el niño

Me refiero a libros que no solo sean respetuosos, sino que se pongan del lado del niño. Que sea un aliado. Pongamos por ejemplo un cambio como el de tener un hermanito. En vez de buscar un libro moralizante y que reconvenga al peque, se puede sin más reconocer y validar sus sentimientos. Sí, a mí también me pasa, dicen los personajes del libro cuando al crío le cuesta encontrar esa respuesta en la vida real.

Este libro es La reina de las lentejas. O Ahora no, Bernardo.

Libros que le recuerden a a gente querida

Aquí puede tratarse de cualquier libro, lo importante es la persona que evoca. Este cuento te lo regaló tu primo, en la ciudad en que transcurre esta historia vive tu tía, estos personajes se van de paseo al bosque como tú cuando vas a ver a los abuelos.

A veces es la persona que regala el libro. Otras veces, crear la conexión con el mundo del crío es parte del trabajo de la lectura en voz alta. Recuerda que la lectura compartida es parte leer, parte dialogar.


A mí me gusta mucho leer. A ti, si estás leyendo esto, supongo que también. A algunos peques, no tanto. Acertar con el libro es importante, y por eso ofrezco estas ideas y sugerencias aquí. Pero más importante aun es tener paciencia y perseverar, evitando convertir el placer de la lectura en una obligación o un castigo. Las claves son:

  • Que ambos lectores disfruten
  • Que el libro le sirva al niño: a vivir, a entender, a soñar, a imaginar.

Y ahora, deja de leer esto, saca un libro y lee. ¡Y luego vuelve aquí a contarme cómo te fue!


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *